Vuelve la Copa del Rey para los albinegros con un partido ante un rival directo como es el Alcorcón donde la clave estará en la “máxima concentración” según el jugador Mikel Rico
En el fútbol, como en la vida, una vez que tocas fondo solo puedes impulsarte para salir hacia delante. Generar pequeños incentivos que lleve a los que te animan cada día, y en cada partido, a creer en ti y conseguir el objetivo. Tras tres empates consecutivos y trece jornadas sin encontrarse con los tres puntos, el F.C Cartagena logró la ansiada victoria ante su afición 224 días después. Una alegría en un momento clave de la temporada y con la eliminatoria de la Copa del Rey a la vuelta de la esquina.
Los albinegros (12 puntos) se mantienen en la lucha por la salvación que marca el Villarreal B con 17 puntos aunque la situación no es nada fácil para el equipo. “Está siendo duro porque al final estamos mereciendo más de lo que tenemos. Pero eso en el fútbol no se entiende y al final los resultados son lo que mandan”, señala Mikel Rico, mediocentro del Cartagena y exjugador del Athletic de Bilbao. El próximo miércoles en Copa tendrán una nueva oportunidad ante el Alcorcón para revertir esa situación crítica donde la clave, según Rico, estará en “la máxima concentración, y más en campos como Santo Domingo”.
«Está siendo duro porque al final estamos mereciendo más de lo que tenemos»
“Lo bonito de la Copa es que es un torneo eliminatorio, el que pierde está fuera, y es como una final. Por eso es muy atractiva y hay tantas sorpresas”, indica Rico que cuenta con experiencia en la competición ya que alcanzó la final en 2015. Ambos equipos llegan a la eliminatoria con ganas de dar una alegría a su afición. En una competición donde el mínimo fallo puede sentenciar el partido haciendo de este una final ya que para el mediocentro cartagenero “si fallas estás fuera”.
El Cartagena lleva dos años consecutivos alcanzando la tercera ronda de la Copa del Rey. Pero las dudas en la afición siguen en el aire pese a la victoria ante el Sporting de Gijón. Mario Álvarez (32 años) es socio del club albinegro desde los nueve años y señala que “el equipo no viene con una buena dinámica. Pero las eliminatorias son muy diferentes a la fase regular, por lo que ganar en copa contra el Alcorcón puede revertir la situación en la que viene el club”. Del mismo modo, Teresa Quijada (25 años y socia de nacimiento) asegura que su corazón y su cabeza están divididos. “Casi todos, por no decir todos, los aficionados del Cartagena tenemos una visión un poco pesimista. Mi corazón cree que sí va a conseguir ganar en Alcorcón, pero a mi cabeza le cuesta un poco más”, expresa.
Por otro lado, Alejandro Moya, periodista de Cadena SER Cartagena, explica que al conjunto de Julián Calero le sigue faltando fortuna y fortaleza mental para seguir hacia delante en lo que resta de temporada. Aunque la Copa puede venir bien anímicamente. “Es una oportunidad de ganar y soltar un poco de lastre. Es cierto que el Alcorcón es un rival directo de la zona de abajo. No le pudo ganar en Liga y se ve como una oportunidad más de romper la mala dinámica”, añade.
Una Copa cargada de ilusión
Sin embargo, dentro del vestuario las sensaciones son completamente distintas. Iván Calero, lateral derecho del F.C Cartagena, ya sabe lo que es jugar en el Estadio Municipal Santo Domingo por su pasado alfarero. Explica que “volver allí siempre es especial aunque no deben de jugar una mala pasada las emociones”. “Vamos a afrontar el partido de la mejor forma para poder estar en tercera ronda y que nos toque un primera como nos ha tocado en temporadas anteriores”, cuenta el jugador. Además, añade que la Copa del Rey “tiene que ser una motivación y una competición donde al club y la propia afición le genere ilusión jugar y participar.
Por su parte, Mikel Rico afirma que “será un partido de ponerse el mono de trabajo”. “Es un partido duro, el campo del Alcorcón donde el año pasado pasamos en penaltis estando ellos en primera RFEF. Además, empatamos en Liga en un partido igualado. Así que vamos a ir a por todo y a por la Copa. La gente puede estar segura, no nos sobra la Copa”, indicó el mediocentro.
«Será un partido de ponerse el mono de trabajo»
Una de las piezas claves para los jugadores es el apoyo de los aficionados. Esto aún con la situación cuesta arriba no hacen otra cosa que animar al equipo. O al menos así lo sienten los jugadores Rico y Calero. “No solo nos están respetando, que ya es mucho, sino que encima te animan y yo creo que la gente está con nosotros”, cuenta el centrocampista. Asimismo, Calero índica que: “Sentimos al final que a poco que haces recibes mucho sobre todo cuando jugamos en casa. Y creo que eso va a ser parte fundamental si queremos ganar en Alcorcón y si queremos salvarnos”
Y ¿por qué no?
Un Cartagena que, pese a no verse favorito, cuenta con el apoyo de una afición comprometida con el equipo. “Hay opciones de pasar a la siguiente ronda. Pero el equipo no es favorito aunque los números indiquen que están mejor fuera de casa”, explica Moya. “Aunque me enfade y mi cabeza me traicione muchas veces, siempre creeré en este equipo”, afirma Quijada. También Álvarez cuenta que acudirá a Santo Domingo a “dejarme la voz con ellos”.
Como dice el jugador Mikel Rico, soñar es muy bonito y más en estas primeras rondas. “Todos los años vemos equipos que dan la sorpresa y llegan lejos y ¿por qué no nosotros?, añade el futbolista. Y es que el Cartagena, tiene en su mano la oportunidad de encauzar la buena dinámica que está consiguiendo pese a los empates y permitirse, por qué no, soñar en Copa.